Regala amor, una emoción para compartir

En muchas entradas hemos hablado sobre que el amor es la emoción más compleja. Tanto es así que algunos autores dudan de que sea una emoción básica; de hecho, no está en muchas de las clasificaciones de emociones. Pero, desde luego, sí está presente en nuestras vidas, y necesitamos que lo esté, por eso: regala amor, pues es una emoción para compartir.

“El amor y la alegría son dos alas para las grandes acciones”

Goethe

La galaxia amor se sitúa a la misma altura que la galaxia alegría. Es una de las tres emociones básicas positivas y puedes llegar a alcanzarla en varias situaciones y con diferentes niveles de intensidad.

La complejidad de esta emoción es debida, en gran medida, a que hay una sola palabra para referirnos a muchos tipos y formas de amor. ¿Existen muchos tipos de amor? Si nos remontamos a la antigüedad encontramos varias palabras griegas para entender la diversidad del “amor”. Entre ellas destacamos tres:

Eros se refiere al amor erótico, es el amor pasional. Es el conjunto de tendencias e impulsos sexuales de una persona.

Ágape es un tipo ideal de amor, amor puro, caritativo, altruista e incondicional. Puede ser el amor a los padres. Proviene de la palabra en latín que se usaba para referirse a una comida fraternal de carácter religioso entre los primeros cristianos, que estaba destinada a estrechar los lazos que los unían.

Filia se refiere a un amor virtuoso, desapasionado. Es el amor que mostramos a amigos, familiares y a nuestro entorno en general. También puede referirse a una afición.

Aprender a amar es un proceso progresivo. Se necesita tiempo y esfuerzo para aprender cómo se regala amor. Desde pequeños recibimos códigos de afecto de nuestros familiares y seres más cercanos que conforman rasgos de nuestra personalidad. Si logramos conocer los matices del amor podemos llegar a gestionar nuestra educación prosocial.